Mi profesión y lo que me gusta hacer en la vida, mis aficiones, tienen un nexo común que los describe a todos: la salud. Crecí observando a mi padre, Pediatra. A él le debo mi vocación. Su moral, la ética con la que afronta la medicina, la búsqueda de la salud por encima de todo, tratar a los pacientes como personas y no como clientes, y la necesidad de renovarse y mejorar continuamente han sido mi escuela y están presentes en todo lo que hago.

 

Siempre me interesó el deporte, de niño jugaba al fútbol en el equipo de la ciudad. Pero fue en los veranos en la Playa de Salinetas, en Canarias, donde teníamos una casa familiar que era punto de encuentro con mis tíos y mi abuela, donde nació mi gran pasión por el mar. Fue donde empecé a pescar e hice mis primeras inmersiones para hacer pesca submarina.

 

Muy pronto me interesó la Odontología y la Cirugía. Emprendí un viaje que me llevó hasta la Universidad Alfonso X el Sabio, donde hice la carrera y me especialicé en cirugía, implantes e implantoprótesis.

Desde que terminé no he parado de trabajar. Empecé con el Dr. Marco Ojeda y en la Clínica del Dr. Gustavo Ojeda. En 2009 empecé a trabajar como socio de la Clínica Dental CDA, en la ciudad de Telde, ejerciendo a su vez como implantólogo. Más tarde, decidí que era el momento de emprender mi propio proyecto clínico, la Clínica Dental Quintana López, que dirijo actualmente y que no ha parado de crecer desde sus inicios.

Vivo con emoción cada día en la Clínica. Los casos clínicos de mis pacientes, sus inquietudes, mi equipo, que todo esté en perfecta armonía y un montón de proyectos nuevos siempre sobre la mesa. Mi trabajo es simple: ser mejor cada vez en todo lo que hago.

Crezco con el reto de dar siempre un paso más.

En este blog compartiré mis reflexiones, mi actividad. Un rincón donde acercarnos y hablar de tu a tú.